POSTES Y CABLES,
EL INCONCIENTE ÓPTICO EN LA VENTANA.
(Muestra del taller de Fotografía Básica Cep)
Siempre hay algo “que no vemos” en lo que vemos, o más exactamente algo que no (sabemos que) conocemos en lo que vemos. La fotografía y su capacidad de detener el flujo temporal, nos coloca en una posición de observadores sincrónicos de lo que ya paso, de ese instante que murió. Muchas veces tomamos una fotografía sin comprender que mecanismos median en ese acto, y obtenemos mucho más de lo que vimos, tal como suele ocurrir con los postes y los cables, nunca vistos y siempre presentes en las fotografías de exterior en las ciudades.
La “Vista de la ventan de Le Grass” es la fotografía más antigua conservada, data de 1826 y fue obtenida por Nicéphore Niepce. Desde entonces la ventana ha sido muy significativa en la fotografía, se dice que ella es una ventana al mundo, o que vemos todo por esa ventana que es el visor. También la ventana es interesante debido a que ella nos permite ver de un adentro a un afuera y de afuera hacia adentro. Viene a ser una metáfora del arte, donde se expresa lo mas profundo del ser, pero también, donde el espectador recrea y resignifica todo aquello que tiene por delante. Una ventana trasmite en parte y refleja en parte; es un ojo, es un marco, que recorta la realidad y que la muestra.
Como siempre, hoy en esta muestra del taller, la fotografía nos suscita preguntas más que darnos respuesta.
Nico Talone
www.talleresculturales-manosdelsur.blogspot.com
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